Continúa el proyecto de siembra de alevines en Laguna El Carbón

Título: Se multiplican las truchas de Vanguardia

En el espejo de agua natural denominado Laguna El Carbón,  dentro del yacimiento Cerro Vanguardia, hay truchas. Muchas truchas. Son el resultado de una prueba piloto que realiza la compañía minera con el asesoramiento de expertos de la Estación de Piscicultura de Comandante Luis Piedra Buena. La experiencia, que tal vez pueda servir a futuro como base de un circuito productivo, demuestra  entre otras cosas, la ausencia total de contaminación en las napas del yacimiento.

(Por Roberto Mendoza especial para La Opinión Austral)

11/11/2012 (AIMSA-SsntaCruz) La laguna El Carbón es un cuerpo de agua superficial ubicado en una geodepresión natural del terreno, ubicado al sudeste de la propiedad minera de Cerro Vanguardia.

En condiciones normales, se presenta como la mayoría de los cuerpos de agua de la zona, con un régimen de presencia semipermanente. Debido a la intervención antrópica mediante la cual se le suministra un flujo de agua ininterrumpido, producto del drenaje de los pits y de la evacuación de mina subterránea, este cuerpo de agua tiene desde hace unos años, un carácter permanente.

La trucha es un pez de agua dulce, capaz de adaptarse a distintos ambientes, pero en todos los casos, existe un requisito innegociable: el agua en la que vive debe estar totalmente libre de contaminación.

En Santa Cruz, sólo existía un emprendimiento de piscicultura, dedicado a la cría de esta especie, el que comenzó  hace 20 años de la mano de la Municipalidad de Comandante Luís Piedra Buena, que instaló la conocida planta de la Isla Pavón.

En 2008, la empresa Anglo Gold Ashanti, operadora del yacimiento Cerro Vanguardia, comenzó una interesante experiencia de cría en el espejo de agua: “Se trata de una prueba piloto que, además de un invalorable caudal de información técnica acerca de la cría de estos peces en este tipo de ambientes,  permite mostrarle a la comunidad que no hay índices de contaminación en nuestras aguas”, explicó Germán Stocker, Jefe de Comunicaciones de la compañía minera.

En los conceptos coincidió Rubén Hudson, técnico en acuicultura, que desde hace muchos años trabaja en la planta de piscicultura de la Isla Pavón: “Los proyectos de Cerro Vanguardia y de la isla Pavón pueden compararse en el sentido que en ambos se trabaja la trucha arco iris, aunque tienen algunas diferencias importantes” indicó Hudson. “En el proyecto de Cerro Vanguardia trabajamos con piscicultura extensiva, que significa que aprovechamos un ambiente que se generó artificialmente. Este proyecto se realizó en la laguna El Carbón, que tiene 45 hectáreas y seis metros de  profundidad. En este espejo se ha desarrollado una fauna nutritiva para los peces, que permite el ciclo de vida, una cadena trófica dentro del ambiente donde se han desarrollado los productores primarios, que son algas, los consumidores primarios que son el zooplancton, y que permite la vida de animales de distintos tamaños”, explicó el técnico.

“En cualquier ambiente acuático natural y libre de contaminantes, se genera vida a partir de las algas que son las productoras. A partir de allí hay una cadena alimenticia que es lo que aprovechamos. En el lugar agregamos peces que van a vivir a expensas de esa cadena. Para ello debimos evaluar la laguna, conocer la disponibilidad del alimento, etc. Tras ese estudio, hicimos una siembra de 20 mil alevines que fueron adquiridos a la Estación de Piscicultura de la isla Pavón. Luego de sembrar los peces, fuimos haciendo evaluaciones periódicas para seguir la evolución, que ha sido excelente, y nos permitió al año obtener ejemplares de medio kilo…”

Por su parte, Germán Stocker comentó que “Cerro Vanguardia no se ha planteado esto como un emprendimiento de tipo comercial, sino más bien de investigación. Las empresas mineras suelen ser cuestionadas  como potenciales contaminantes de las aguas y Cerro Vanguardia está interesada en demostrar que las cosas se están haciendo correctamente. La supervivencia de truchas en aguas que provienen de nuestras napas, demuestra mas allá de toda duda que el grado de contaminación es cero. De lo contrario, sería sencillamente imposible que un animal especialmente delicado en ese sentido, pudiera sobrevivir. Vale recordar que hace poco más de un año se realizó un primer raleo de 2.000 ejemplares, los cuales fueron servidos en los comedores del yacimiento para que todas las personas que trabajamos en la compañía podamos degustarlas. En cuanto a las condiciones en que se encuentran los cauces aguas abajo, la compañía lleva adelante un programa de monitoreo comunitario, con participación de vecinos de San Julián y un laboratorio ajeno a la empresa –cuyos resultados, además, son controlados por la Sociedad Rural local–, que da cuenta de valores iguales a los que se registran aguas arriba, es decir que tras catorce años de producción, la composición química y física de las aguas de las napas subterráneas del yacimiento se mantienen con los mismo niveles originales.”

39 centímetros y 1,1 kilos

En la continuidad del proyecto, a mediados del pasado mes de octubre se realizó un nuevo muestreo para continuar el monitoreo de las especies sembradas.

De las capturas obtenidas  se procedió a tomar una muestra al azar para su respectivo análisis en laboratorio en la localidad de Piedra Buena, con los cuales se determinaron   largo-peso, se analizaron  los contenidos  estomacales, observando la diversidad y composición de la dieta para la época, el índice de repleción  gástrica, el desarrollo gonadal, estado de gordura, la pigmentación del músculo, datos que permiten determinar el estado general de los peces, de acuerdo a la rutina determinada para este seguimiento.

Los datos obtenidos indican un largo promedio de  39 cm y un peso promedio de 1.100 gramos,  lo que determina un factor de condición óptima,  que continua indicando una condición corporal adecuada, con un crecimiento considerable.

Los técnicos que realizaron el monitoreo también concluyeron que era necesario realizar una extracción de alrededor de 2.000 peces, para asegurar el equilibrio alimentario y la continuidad de la población.

El desarrollo de este tipo de proyectos presupone un largo tiempo de investigación antes de su puesta en marcha, y a partir de ahí, una valiosísima fuente de información técnica de gran utilidad para la comunidad, ya que cualquiera que decidiera  incursionar en esta actividad la tendrá a su alcance.  “A partir de estas experiencias, Cerro Vanguardia firmó un convenio con la Dirección de Pesca Continental de la provincia de Santa Cruz y la Estación de Piscicultura de Comandante Luis Piedra Buena con el objeto de replicarlo en diferentes ambientes de la provincia, aportando los alevines y los conocimientos adquiridos”, manifestó el Jefe de Medio Ambiente de Cerro Vanguardia, Fernando Salomone.  La Dirección de Pesca Continental tiene previsto realizar dos siembras, en los lagos Cardiel y Buenos Aires, de aproximadamente 40.000 alevines de trucha arco iris, con un peso promedio de 5 gramos.

También hay previstas algunas siembras de menor escala en lagunas de algunos campos que cuentan con el ambiente adecuado, en función de solicitudes por parte de los productores ganaderos propietarios de esos establecimientos del área de San Julián, algunos de ellos con la idea de replicar la experiencia desarrollada por Cerro Vanguardia.

Esta actividad entusiasma, ya que les ayuda a la diversificación productiva del campo, donde aprovechan un ambiente inutilizado con distintas opciones productivas, ya sea por el lado de producción de carne de pescado de manera extensiva o por la explotación turística a través de la pesca deportiva.