Yamana ya compró Extorre
La minera canadiense Yamana Gold concretó la adquisición de la totalidad de las acciones de la también canadiense Extorre Gold Mines, que operaba hasta la fecha el proyecto Cerro Moro –ubicado 80 kilómetros al sudoeste de Puerto Deseado, en la provincia de Santa Cruz– a través de su subsidiaria Estelar Resources, la que, en consecuencia, pasa a estar controlada efectivamente por Yamana.
Durante el día de hoy se realizó en Vancouver, Canada, la Asamblea Extraordinaria de Accionistas de Extorre, a fin de considerar la oferta de compra que hiciera Yamana del 100% del paquete accionario de Extorre.
En dicha reunión los accionistas votaron favorablemente a la realización de la operación de venta de las acciones de la Extorre a Yamana. Con esta decisión la transacción queda aceptada y se procederá a su registración ante las autoridades correspondientes en Canadá.
Esta operación incluye a Cerro Moro, principal activo de Extorre en la provincia de Santa Cruz, pero también involucra la propiedad de otros prospectos mineros del Macizo del Deseado en la la provincia de Santa Cruz; y además prospectos en las provincias de Chubut y Mendoza.
El acuerdo inicial de Extorre con Yamana se firmó el pasado 18 de junio, y formalizó la oferta de esta última, de adquirir la totalidad de las acciones de la primera a un valor superior al de la cotización de ese momento, lo que representó una transacción por un monto cercano a los 415 millones de dólares. En dicho acuerdo, los directivos de ambas compañías habían fijado el día de hoy como fecha límite para concretar el traspaso definitivo.
Yamana Gold es una compañía minera muy ligada a Argentina. En la actualidad opera la mina de oro y plata Gualcamayo, en San Juan, es accionista de la mina de cobre Bajo La Alumbrera (Catamarca) y del proyecto Agua Rica, de la misma provincia, a la vez que conduce la exploración del proyecto Suyai en cercanías de Paso del Sapo, Chubut.
En el momento de firmarse el acuerdo, el CEO de la compañía, Peter Marrone, afirmó que “el proyecto Cerro Moro se ajusta muy bien a la cartera que Yamana tiene, y tanto nuestra experiencia operativa en la Argentina como la solidez financiera con que contamos, nos permitirá desarrollar el proyecto en forma oportuna”, a la vez que agregó que «durante los últimos años, Yamana se ha centrado en el crecimiento orgánico y tenemos la intención de continuar con esta orientación estratégica, y en ese sentido Extorre representa una de estas oportunidades, ya que si bien se trata de una operación relativamente pequeña, que representa sólo el 3% de la capitalización bursátil de Yamana, podría representar más del 10% del total de nuestra producción de oro equivalente”.
Cabe recordar que previo a la firma de este acuerdo, Extorre había comunicado que estaba estudiando encarar el desarrollo de Cerro Moro en etapas, para poder enfrentar de esta manera las fuertes erogaciones necesarias, buscando un autofinanciamiento a través de una operación que se iría ampliando con el tiempo.
El fin de semana pasado, el directivo de Yamana Gold, Hernán Vera, mantuvo reuniones con el intendente, concejales y comerciantes de Puerto Deseado, en las que ratificó la viabilidad del proyecto, y esbozó los planes de trabajo con la comunidad que desarrollará la empresa en el lugar, comprometiendo mantener y ampliar el impulso al desarrollo de proveedores locales y el mantenimiento de planes de capacitación para captar el mayor porcentaje posible de mano de obra del lugar.
En Cerro Moro, Extorre mantendrá el acuerdo con la estatal santacruceña Fomicruz, por el cual la minera provincial puede acceder al 5% de participación accionaria. Además, en el bloque de propiedades Bahía Laura (que rodea a Cerro Moro y es propiedad de Fomicruz), Extorre podrá acceder a una participación del 80 % en una posible joint venture, por medio de la inversión de 10 millones de dólares.
El proyecto Cerro Moro cuenta con un recurso indicado de 1,35 millones de onzas de oro equivalente en la categoría indicados y 1,05 millones en la categoría inferidos. Ya cuenta con la declaración de impacto ambiental aprobada por Minería de Santa Cruz, aunque se estima que la compañía realizará un nuevo estudio de factibilidad en que refleje tanto sus planes de desarrollo como su capacidad de financiamiento.