Persiste el conflicto petrolero, a la espera de un inminente desalojo

Buzzi ordenó dictar conciliación obligatoria

La Justicia Federal ordenó ayer despejar la ruta. Sin embargo, continúan las medidas de fuerza llevadas adelante por el grupo Dragones. Ante la prolongación de la situación, el gobernador Buzzi ordenó a la Secretaría de Trabajo dictar la conciliación obligatoria e hizo un llamado para que “la medida sea acatada por las partes, es la oportunidad que tienen para demostrar que hay voluntad de salir de la grave situación en la que han puesto a toda la comunidad”.

03/07/2012 (AIMSA-Chubut) El conflicto en Cerro Dragón, ya lleva 13 días con la consecuente inactividad productiva, tras la toma violenta del yacimiento más importante de la Argentina, y pone en vilo la producción hidrocarburífera de la región. Se estima que por la medida, hay 14.500 puestos de trabajo afectados y 96 equipos de torre paralizados. Además, la falta de negociaciones entre la operadora Pan American Energy (PAE) y los trabajadores disidentes de la UOCRA pondría en riesgo los salarios del mes de julio para la activad privada y estatal provincial.
El gobernador chubutense, Martín Buzzi, instruyó a la policía a “disuadir a los manifestantes», pero sin reprimir. El mandatario señaló que «el gobierno tiene plena conciencia del objetivo desestabilizador que están persiguiendo quienes están alentando los desmanes». «Hay quienes quieren que esto termine con un muerto”, denunció e hizo un llamado a “la responsabilidad de todos, porque nos quieren empujar hacia el enfrentamiento y la violencia».
Buzzi agregó que “se mantendrá muy firme en la exigencia para que se normalice la situación» y aseguró que “está evaluando distintas alternativas”.
Esta mañana se vivieron momentos de gran tensión, tras la decisión de los gremios petroleros de intentar llegar a sus puestos de trabajo, aunque finalmente desistieron de la medida y retornaron a sus hogares. Alrededor de 3 mil trabajadores se apostaron a la vera de la Ruta Nacional N° 3, en inmediaciones del corte de ruta que mantiene el grupo de Dragones, a la espera de la reapertura de los caminos para llegar a los yacimientos.
Desde el lugar, el secretario general del Sindicato de Petroleros Privados, Mario Mansilla, aseguró que no van a confrontar con los trabajadores de la construcción. “Si no hay garantías” para pasar hacia la zona de trabajo, dijo, “volveremos cada uno a su casa y mañana lo intentaremos de vuelta».
«El Gobierno de la provincia dice que nos va a garantizar el acceso libre y estamos esperando que el comisario Luis Butazzi nos dé la señal porque la jueza (Eva Parcio) dio instrucciones de que la ruta se tiene que liberar”, indicó el gremialista.
Al respecto, el secretario general de Jerárquicos, José Llugdar, señaló que “el objetivo es subir de manera pacífica”.“Los dragones son trabajadores como nosotros. No vamos a pasar por arriba (de ellos) porque son compañeros también”, dijo e informó: “Vamos a retomar esta metodología. El compromiso está, así estaremos hoy, mañana o el tiempo que haga falta para recuperar nuestros puestos de trabajo”.
El corte de ruta 3 y 26 que mantienen alrededor de 500 manifestantes fue monitoreado por 120 efectivos policiales de la provincia del Chubut, quienes aguardaban el levantamiento del piquete, ubicados a unos 100 metros de los manifestantes.
El jefe de la Unidad Regional de Comodoro Rivadavia, comisario Luis Butazzi, a cargo del operativo aseguró que mantienen un “diálogo constante» con los trabajadores, «por lo cual no hay motivos para que exista ningún tipo de conflicto”. “El objetivo de la fuerza -indicó- es garantizar el libre tránsito por las rutas como lo establece la Constitución”, lo que esperan poder hacer “antes de que finalicé la jornada”.
Por su parte, Gustavo Montiel, uno de los manifestantes del grupo de Dragones reconoció que “estamos jugados y si perdemos esto, perdemos todo”. En declaraciones radiales, el trabajador se refirió a la situación que los mantiene en la ruta reclamando «con el ánimo por el piso», ya que «es difícil estar acá todos los días con frío, tragando humo y viendo como la sociedad es perjudicada”. Según denunció “algunos no entienden que el reclamo es justo y que la operadora nos está usando».
Los Dragones piden una equiparación salarial con los trabajadores petroleros de un 23 por ciento. También solicitan la reincorporación de 14 obreros despedidos. Estos reclamos derivaron días pasados en la toma violenta de las instalaciones del yacimiento Cerro Dragón, donde se registraron destrozos de oficinas y camionetas, además de poner en riesgo el suministro de gas hacia la Cordillera.
En tanto, la empresa PAE mantiene los niveles indicados en su último comunicado distribuido hace tres días. Allí se indicó que Cerro Dragón está produciendo al 54% de su producción, tomando como base las cifras de extracción de hidrocarburos anterior a la toma

Concliación obligatoria

Al mantenerse la situación sin solución visible en el corto plazo, el gobernador Martín Buzzi ordenó a la Secretaría de Trabajo dictar la conciliación obligatoria “aún cuando las partes no hayan manifestado su disposición al diálogo”, una medida que “por ley obliga a las partes a suspender de inmediato el conflicto sin ninguna condición que no sea acatar lo que establece la legislación”.
El propio Gobernador explicó que “lo hacemos ahora para darle una nueva oportunidad a las partes que permita salir del conflicto y restablecer la negociación” al mismo tiempo que reiteró que “mantendremos toda la firmeza sin caer en la provocación a la que nos quieren llevar los violentos”.
“Desde el Estado hemos insistido desde el principio del conflicto en que las partes se sienten a dialogar y siempre se puso como condición ineludible que los Dragones levantaran los piquetes. Ahora, ambas partes tienen una oportunidad para demostrar su disposición para poner fin al conflicto”, señaló Buzzi, agregando que “los Dragones deben deponer su actitud y sin condicionamientos sentarse a hacer los reclamos que consideren en un marco de cordura y, por su parte, la empresa debe asumir la responsabilidad social que le corresponde”.
En ese marco, Buzzi dijo “estar seguro que la inmensa mayoría de los trabajadores repudian esta extorsión y lo que pretenden es volver en paz a sus lugares de trabajo, este es el compromiso mínimo que deberían tener todos los sectores interesados en propiciar una salida pacífica de este conflicto que intentó instalar el caos en nuestra provincia”.
Finalmente, Buzzi dijo que “seguiremos firmes pero, reitero una vez más, sin hacerle el juego a los violentos. Que nadie dude que a las instituciones del estado no le van a torcer el brazo un grupo de extorsionadores, que pretenden amedrentar a la gente con hechos de violencia, pero que lejos están de expresar el sentimiento de la inmensa mayoría de los trabajadores”.